¿Cuánto dolor podemos soportar?
¿Cuántas heridas aguantará nuestro corazón?
¿Cuántas traiciones seremos capaces de sobrellevar?
¿Cuánta culpa podemos llevar sobre nosotros?
Muchos creen que por ser jóvenes no entenderemos ciertas cosas y las dudas de nuestro interior solo aumentan.
¿Cuánto más pasará hasta que alguien nos enseñe cómo llenar aquel vacío del corazón?
¿Cuanto más nos equivocaremos hasta que nos expliquen que el amor no es como en las películas o los cuentos?
¿Por qué no nos dijeron antes que llegaran momentos tan difíciles que solo pocos pueden soportar y muchos jóvenes ante eso cometen el gran error de adelantar su final?
¿Por qué no se esforzaron más en decirnos que debemos escoger una carrera o un trabajo que nos guste y apasione ya que de ello tal vez vivamos el resto de nuestras vidas?
Y es que algunos olvidan lo complicado que es ser jóvenes y lo difícil que es tener tantas dudas por resolver.
Algunos olvidan que la edad en donde se definirán nuestras vidas es en la juventud.
Y la verdad es que muy pocos enseñan lo realmente importante de la vida.
Muy poco nos demuestran con el ejemplo aquello que enseñan solo con su voz.
¿Cuánto más tendremos que soportar para ser felices?
¿Cuántas veces fracasaremos antes de encontrar la verdad?
¿Cuántas heridas dejaremos en los demás?
¿Cuánta tristeza tendremos que superar?
¿Cuánto más tendrá que pasar para que aquellos que conocen las respuestas hallen el valor para decirlas?
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