Crisis

¿Alguna vez les ha pasado que se han sentido tan mal que no tienen ganas de nada?

¿Sientes que la vida te ha tratado tan mal y que has sufrido tantas decepciones que ya no crees en nadie o ya no esperas nada bueno de la vida?

¿Nunca han sentido esa crisis de identidad, ese momento en el cual aquella persona valiente y positiva que solías ser pareciera haberse marchado y ahora aparece la peor parte de ti?

Esa parte holgazana que no quiere despertarse en las mañanas, que no quiere ir al trabajo, que quiere estar todo el día solo, que ve su casa como si fuera una cueva o que se queja de todo y para la mayor parte del tiempo melancólica.

¿Creó que ya me están entiendo o me equivoco?

Pues, es extraño porque cuando eres adolescente no te imaginas nunca de este modo, no crees que seguirás siendo tan vulnerable, no te imaginas que seguirás teniendo los mismos problemas de identidad o que te seguirá costando encontrar las respuestas a tus preguntas.

Cuando eres escolar o comienzas la universidad te imaginas a ti mismo como un profesional y como una persona completamente madura y capaz, pero luego descubres que puedes ser un buen profesional, que puedes ser muy capaz para muchas cosas, pero que por dentro puedes seguir con las mismas dudas de un adolescente o incluso las de joven porque hay cosas que sin importar la edad parecen no cambiar.

Así que no entren en pánico no están solos, imagino que esto mismo les pasa a muchas a personas alrededor de todo el planeta tierra y lo mejor es encontrar esa mejor parte de nosotros mismos y vivir de tal modo que no nos avergoncemos de lo que somos.

Problemas siempre habrán, decepciones también pero en parte eso es lo que le da sabor a la vida y es nuestra responsabilidad o nuestro deber poder vencer todo eso y convertirnos en lo que soñamos ser, así que sigamos adelante con una sonrisa en el rostro, con mucha fe y con la actitud correcta seremos capaces de superar cualquier dolor y podremos ser los héroes de nuestra propia historia.